Resulta que hace algunas semanas acudi a un congreso en el que decían que en el país más rico del mundo una persona ganaba 390 veces más que en el país más pobre del mundo. Al regresar a mi espacio triturado de 2x2 con mi caja retroiluminada y llena de información busque ¿Cuál era el país más rico del mundo?... sorpresa la mía al darme cuenta que el motor de búsqueda famoso me arrojo resultados e incluso casi pareciera como si se hubiese molestado por hacer tal pregunta, ya que me contestaba de esta manera ¿A qué te refieres con el país más rico del mundo?, ¿Al que tiene más ingresos per cápita?, ¿Al que tiene la mayor flora y fauna?, ¿Al que tiene más petróleo?, ¿Al que tiene mejor repartida la riqueza?, etc... etc...
Me quedé atónito, no supe donde dar click, el país más rico por ingreso per cápita ¡Suiza!, el país donde es mejor repartida la riqueza ¡Irlanda!, entonces ¿que buscas? ¿Cuál es el país más rico? tratando de dar respuesta a esta controversial pregunta encontré el top 20 de multimillonarios jeje nuestro compatriota Carlos Slim estaba en segundo lugar, ya que Bill Gates nuevamente ascendió y recupero su reinado con una fortuna valuada en aproximadamente en 36 mil millones de dólares y nuestro representante de México en 35 mil millones. ¿Ironías de la vida o visionarios?. Mientras leía el cómo habían comenzado estos hombres era sorprendente como eran unos Don Nadie y ahora son los hombres más ricos del mundo, cuando de pronto una voz de un compañero pregunto ¿Qué crees que tengan esos hombres que no tengamos nosotros?, me quede analizando su pregunta y le conteste haciendo la misma pregunta, a lo que me comenzó a describir todas las virtudes que cualquier emprendedor lo tiene, sin embargo al terminar se refirió con una mirada retadora y me volvió a lanzar la pregunta ¿Qué crees que tengan esos hombres que no tengamos nosotros?, fruncí el ceño y le respondi: lo que ellos tienen y nosotros no, ¡es frialdad! y lo que nosotros tenemos que ellos no tienen ¡es Paz!.
No es pobre quien poco tiene sino quien desea más.
ResponderEliminarSÉNECA, Lucio Anneo // A lo que yo digo... ¿que importa mas, ser el mas rico del panteon o el pobre mas feliz?